La genética de los semidioses.

Típicamente, todos nos levantamos temprano, lo que resulta relativo es lo que llamamos "temprano".

Pero suponiendo que el término signifique "levantarse de la cama antes de que llegue la hora en que debamos estar en el trabajo", pienso que en su gran mayoría todos cumplimos con este parámetro.

...o quizás no!

Y digo la mayoría, porque existe una raza de seres que poseen por pura suerte genética, la habilidad de alterar las reglas del tiempo y del espacio, al punto de poder redefinir el término TEMPRANO según sus propias reglas.

A esos seres se les conoce como JEFES.

Si algún JEFE esta leyendo esto, por favor, no me malinterprete, no estoy diciendo nada en su contra, MISERABLE DE MI SI ATENTARA EN CONTRA DE SU GRAN PODER!, todo lo contrario, lo que quiero decir es que usted sigue llegando temprano, solo que dados sus poderes sobrenaturales, usted puede llegar temprano cuando usted quiera, pero la mayoría de nosotros, miserables mortales, no entendemos esto.

Por otro lado esto es una mala noticia para el resto de nosotros los mortales, que seguimos rigiéndonos por un invento odioso, llamado reloj, para saber si estamos llegando temprano o no al trabajo, como si tal cosa funcionara realmente.

Y es que por mucho que lo intentemos siempre vamos a llegar tarde al trabajo porque no podemos tener ese poder que tienen los JEFES sobre el tiempo y el espacio.

De nada sirve adelantar el reloj, de nada sirve dormir mas temprano, de nada sirve pedirle a un compañero de la oficina que nos marque la tarjeta de entrada, siempre fallaremos algún dia de nuestras vidas porque se trata de una cuestión de genética mitocondrial.

El asunto es que para ser JEFE, hay que nacer siéndolo, porque todo el asunto de ser un JEFE es producto de millones de años de evolución de las especies, de incontables ensayos y errores que la sabia naturaleza ha realizado, dando como resultado criaturas mas allá de la compresión de cualquier persona común y corriente y que cuyo conocimiento amerita regirse por una serie de reglas de las cuales a continuación describo algunas de las mas importantes:

1.- Ser JEFE no es un título, ni un mérito, ni una distinción, ni una atribución, ni una responsabilidad, simplemente es una raza, y como tal, al reproducirse solo engendran mas JEFES, ya que como todos sabemos, los hijos de los JEFES también son JEFES, con las mismas cualidades del JEFE padre o madre.

2.- Los JEFES son todopoderosos, pueden romper las reglas del tiempo y el espacio, de hecho esa es su principal actividad de recreación, así que no es de extrañar entonces que estén en todas partes al mismo tiempo y que se enteren de todo cuanto ocurre, son todopoderosos y omnipresentes.

3.- Como semi dioses que son, demandan adoración y alabanza, ellos quieren ser adorados y alabados por sus súbditos, de hecho, esa es la principal fuente que tienen para alimentarse, así que, anímese con un regalo, una cesta de frutas, una tarjeta de buenos días, e incluso porque no, llévele de vez en cuando un sacrificio humano de sangre, la astucia esta en saber el estado de ánimo que tengan en determinada oportunidad.

4.- Los JEFES tienen su propio idioma, por esa razón es que usted ve que cuando un JEFE le habla a otro JEFE, siempre hay unas risas y manotones de por medio, y es que son los mismos, se conocen incluso a distancia y sin tratarse mucho, pero mucho cuidado, porque aunque las palabras que utilizan tienden a confundirse con el idioma vulgar de los súbditos, esas palabras contienen un código especial indescifrable que es imposible de imitar, así que NUNCA INTENTE HABLAR EN ESE CÓDIGO ANTE UN JEFE, la pagara muy caro y le pesará por el resto de sus vidas, será una maldición que llevarán a cuestas incluso los hijos de sus hijos y mucho mas allá.

Por todo lo anterior, queda claro que mas que preocuparnos por llegar temprano al trabajo, o cumplir con todas nuestras atribuciones, tratando de ser un empleado ejemplar, o buscar excusas para tapar nuestras fallas como echarle la culpa al tráfico, al reloj o a la lluvia, mas bien, procuremos mantener feliz a nuestro JEFE, llevándole nuestra cuota diaria de ofrendas y cantos de alabanza, porque aparte de eso, no hay mas nada que se pueda hacer para evitar su ira.

Alabados sean los Jefes de la tierra, háganse sus voluntades!